El ex viceministro Miguel Olmedo se encuentra en una encrucijada política, luego de recibir un ultimátum de sus superiores en el movimiento Honor Colorado, quienes le instan a trabajar en conjunto con las nuevas figuras clave del equipo departamental, el gobernador Denis Lichi y el diputado Hugo Meza. De no ceder a estas exigencias, el departamento de Cordillera podría continuar perdiendo cargos de relevancia dentro del gobierno nacional. Según fuentes del diario el Observador el acercamiento de Olmedo para conformar la unidad es cuestion de dias o semanas.
Miguel Olmedo cambiará su discurso en busca de los objetivos del 2026? |
La situación se intensifica tras conocerse que en la reciente asignación de cupos para la cárcel de Emboscada, de un total de 90 vacantes disponibles, apenas 8 fueron destinados a representantes de Cordillera. Este hecho se presenta como un claro ejemplo de la falta de influencia del departamento en la distribución de recursos y oportunidades, lo cual genera preocupación entre los líderes y militantes del movimiento.
Según analistas, la postura desafiante de Olmedo podría poner en riesgo la proyección y el crecimiento del movimiento Honor Colorado en Cordillera. La negativa de Olmedo a colaborar con el equipo ha sido interpretada como un acto de “inmadurez política” que amenaza con limitar aún más el acceso a espacios estratégicos en el gobierno, lo que podría impactar en las aspiraciones políticas y el desarrollo del departamento.
Si Olmedo no cede a las demandas de unidad, el partido podría verse en serios riesgos de seguir perdiendo municipios, tirando asi en agua de borraja el gran trabajo que se hizo para recuperar la gobernacion.