Nuevos líderes de HC buscan revitalizar al partido, mientras Olmedo lanza duras críticas y vaticina días grises.

Mientras los flamantes líderes de Honor Colorado en Cordillera, Hugo Meza y Denis Lichi, se enfocan en diseñar estrategias y proyecciones para rescatar de las cenizas al Partido Colorado, que de 20 distritos de la Cordillera, solo tiene 6 municipios, una sombra de conflicto llamado Miguel Olmedo amenaza con empañar este esfuerzos. 

Miguel Olmedo declaró que en Caacupé el 2026 no va a ganar un colorado las municipales 

A contracorriente del trabajo en equipo, Miguel Olmedo, exreferente de peso en la zona y hoy relegado en el escenario político nacional, ha optado por distanciarse de las acciones colectivas y sumirse en una narrativa de descontento y negativismo.

En su reciente y mediática aparición, Olmedo lanzó un polémico vaticinio, prediciendo una nueva derrota de la ANR en la capital espiritual de la República. Sus palabras, lejos de motivar a su equipo, sugieren que el exlíder ya no tiene intenciones de contribuir en la campaña. De hecho, más que una crítica constructiva, sus comentarios parecen el eco de una retirada antes de que el juego comience. "Antes de salir a la cancha, ya tiró la toalla", es lo que muchos han interpretado, preocupados por el impacto de sus declaraciones.

En medio de este panorama, la labor de Meza y Lichi se torna doblemente desafiante. No solo deben reconstruir la confianza del electorado, sino también superar los obstáculos que surgen dentro de sus propias filas, mientras buscan devolver al Partido Colorado el protagonismo que una vez tuvo en la región.


Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente